Con certeza se conocieron… Y en algún momento de sus vidas el fotógrafo Tomás Montero Torres capturó con su cámara las facciones de quien, entre otras proezas, fue el principal portadista de la revista Siempre! -en la que colaboró a lo largo de 27 años- y el prestigioso caricaturista tuvo a bien destacar, con su particular maestría, algunos de los rasgos del reportero gráfico:
Jorge Carreño Alvarado nació en Tehuacán, Puebla, el 8 de marzo de 1929; Tomás Montero Torres en Morelia, Michoacán, el 13 de noviembre de 1913. A pesar de su diferencia de edad, ambos llegarían a la Ciudad de México en la época de su transición a una urbe cosmopolita, con el impulso de perfeccionar una vocación natural por el dibujo, Carreño en la escuela de artes La Esmeralda y en la Escuela Libre de Arte y Publicidad; Montero en la Academia de San Carlos de la UNAM. Los dos se verían inmersos en el apogeo de las revistas ilustradas de la época, lo mismo que en diferentes periódicos, aportando cada cual visiones críticas de lo que les rodeaba.
Esperamos que la investigación del acervo legado por Montero Torres nos devele próximamente más acerca de cuándo y cómo se conocieron, sobre su relación profesional… Por ahora, el detalle personal de la caricatura y las poses relajadas, contentas y en exteriores de las fotografías, permiten recrear una posible amistad…
Sigo maravillándome y sorprendiéndome por la riqueza gráfica que dejó tu abuelo.
Un beso Martha! lo están haciendo muy bien… la riqueza del archivo está ahora en la riqueza de las manos de sus nietas y está en las mejores manos que tu abuelo jamás podría haber soñado!
Felicidades, mi admiración y respeto para ustedes tres!
¡Qué coincidencia y qué gratos recuerdos! Así como conocí a don Tomás Montero porque fue mi maestro de fotografía, traté igualmente a don Jorge Carreño cuando hicimos un viaje juntos a Perú, en junio de 1979. Fuimos acompañando a don Pedro Ferriz, entonces director de Notimex, para firmar un acuerdo de intercambio con la Agencia de Noticias Andina. Ahora reencuentro juntos a los dos personajes, gracias al trabajo acucioso de quienes tienen a su cargo el rescate de este archivo fotográfico. Felicidades, Martha.
Jamás imaginé que me fuera a encontrar esta página. Mi emoción no cabe en este espacio donde habito, y mis ojos se nublaron al ver las fotos de Jorge. Recordé de inmediato cuando lo conocí en 1966 en la Colonia Roma, Ciudad de México, estaba invitado a comer por mi madre y después platicó tanto conmigo. Le mostré lo poco o mucho que hacía a mis escasos 16 años y al siguiente día llegó por mí en la tarde. Me invitó a ir con él a su casa a terminar una caricatura y me mostró su estudio y yo prudentemente, bajé al primer piso de su casa y me senté en la sala observando algunas pinturas que él había pintado, como aquel detalle de la última cena. Nos fuimos en su auto de nuevo y llegó a el periódico El Universal a dejar su cartón que era de diario. De ahí nos fuimos a Arte y Material y me invitó a conocer la tienda en Ayuntamiento; me quedé tan sorprendido porque todo aquel material que yo veía era un deleite, preguntó qué necesitaba yo y con pena le dije que nada. Claro que él no se la creyó y tomó un carrito como esos del super y comenzó a poner material dentro de el. No me di cuenta y echó un proyector de cuerpos opacos y hasta una mesa de dibujo con su banco me compró de regalo y !!aun los conservo!! No puedo evitarlo pero las lágrimas me brotan como agua al recordar todos momentos con sus detalles que tuvo conmigo. Después de salir de ARTE Y MATERIAL me llevó a la calle de Uruguay No.5 en el mero centro y me invitó a subir a ese edificio de 4 pisos y yo la verdad ignoraba donde estábamos hasta que llegamos a la dirección y una señora, la directora, nos atendió saludando a Jorge con tanto carño que se notó en todos desde que entramos al primer piso por aquel viejo montacargas. Cual sería mi mayor sorpresa que me llevó a la Escuela Libre de Arte y Publicidad porque me había inscrito él mismo en ella. Nunca terminaré de agradecerle este enorme detalle y créanme que adoro a este gran dibujante como si hubiera sido parte de mi familia, era un gran caballero y fina persona. Lo extraño pero conservo muchas cosas de aquel material que él me compró para iniciar mis estudios como dibujante publicitario en aquel año de 1967. Jorge Carreño será siempre bien recordado, se lo ganó a pincel y pluma, con tinta y colores, con amabilidad, bondad y don de una gran persona. Gracias Jorge.
Rene Manning Duarte de Hermosillo, Sonora.
Me olvidé de mencionar que la mesa de dibujo que me regalo Jorge Carreño está con una dedicatoria y firmada, el proyector ya no lo uso porque preferí guardarlo antes que se estropeara. Tuve una escuela de dibujo alla a principio de los años 70’s y le llamé por teléfono para invitarlo a la inauguración de mi escuela y me dijo que ya tenía un fuerte compromiso para esa fecha pero que de cualquier manera hiciera de cuenta que él estaría presente. Nunca la inauguré oficialmente porque ese honor solo le correspondía a Jorge Carreño, aun así y no haya podido hacerlo por otros motivos ya contraídos. Gracias por permitirme escribir esto y créanme que no paro de llorar de tanta emoción porque también recordé cuando estaba en mi oficina y me dieron la noticia de su fallecimiento.
RENE… TE FELICITO POR ESTE APORTE DEL GRAN MAESTRO DEL DIBUJO PERIODISTICO POLITICO EL GRAN GENEIO., JORGE CARREÑO QUE TUBE LA SUERTE DE CONOSER CUANDO SE INTEGRO COMO CARICATURISTA DE LA REVISTA SIEMPRE A LA MUERTE DE ARIAS BERNAL QUE DIOS LOS TENGA EN SU SATA GLORIA HA ESTOS GRANDES ARTISTAS DE LA HISTORIA DE MEXICO.
Tendrán alguna fotografía del caricaturista sergio Aragonés?
La buscamos y te avisamos con mucho gusto. Muchas gracias por el interés.